¿Dónde está mi padre?

Un padre podría estar ausente de la vida de los hijos de muchas formas y por varios motivos. Pero la ausencia del padre no es lo mismo que inexistencia. Las familias monoparentales son más frecuentes día a día.

Los niños necesitan un referente para crecer, un espejo en el que mirarse y una persona que le acompañe, le escuche y que esté con él cuando lo necesita. Si esto no es llevado a cabo puede marcar la vida interna del niño y repercutir en su adultez.

¿Qué pasaría si esto sucediera; si el padre estuviera ausente?:

Niños desconfiados. Ya que ni siquiera sus padres han estado ahí cuando se les necesitaba, las relaciones humanas en general se convierten en disfuncionales.

Problemas de conducta. Muchos “niños rebeldes” utilizan esto para suplicar atención la atención de sus padres o tutores. Se portan mal en la escuela, es agresivo.

Problemas emocionales. La falta de cariño por parte de alguno de los padres en la infancia puede generar un adolescente con serios problemas para controlar y entender sus emociones. Nadie le enseñó a hacerlo. Durante la adolescencia se enfrentan a numerosos sentimientos que pueden construir una personalidad frágil a futuro.

Incertidumbre. El no tener una referencia firme en la infancia hace que, de adultos los niños no tengan claras las reglas. Por eso pueden transformarse en adolescentes dubitativos e indecisos, con problemas para tomar decisiones importantes y, sobre todo, con una incapacidad para comprometerse. 

Comportamientos compulsivos. Los niños que provienen de familias con padres ausentes tienden a ser poco racionales, a dejarse llevar por impulsos. Experimentaran ansiedad, estrés y agresion 

Depresión. La angustia de no tener un modelo emocional junto a él que lo guíe en sus emociones y sobre todo las contenga y enseñe a manejarlas; puede desencadenar en el niño la presencia de depresiones.

Adultos muy dependientes. Estos niños serán adolescentes con una dependencia en un futuro por buscar a alguien que llene ese vacío que sienten. Esto puede llevarlos a buscar de forma enfermiza a personas que les “cuiden” permitiendo inclusive vínculos de agresión. Tienen miedo a ser rechazados, a que les abandonen. Por eso, serán capaces de sacrificarse en exceso con tal de tener a alguien a su lado.

Presencia del vacío interior. Nada llena esa sensación; puedo tenerlo todo pero al mismo tiempo me siento vacío. La falta de cariño, atención y cuidados es algo que los acompañara si no realizan un cambio sustancial.

Diversos estudios sobre los tratamientos psicoterapéuticos a largo y mediano plazo; dan la pauta para ayudar a mejora tanto a niños.; adolescente y adultos en su calidad de vida y si fuera el caso reesinificar la ausencia del padre. La psicoterapia es una verdadera herramienta sanadora del dolor generado a lo largo de la ausencia en este caso del padre.

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